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[Llibertat.cat] Sudán del Sur se convirtió el sábado en una nación independiente , un camino irreversible especialmente después del Acuerdo de Paz de 2005 que puso fin a una guerra de liberación larga y sangrienta de veinte años con los sudaneses del norte, de mayoría musulmana.

Los sur-sudaneses celebraron en Juba, la capital, el reconocimiento de su libertad y reconocimiento jurídico durante toda la noche del sábado.

Uno de los elementos que han convertido la nueva república de Sudán del sur en un país finalmente libre y próspero económicamente es el apoyo de Cuba durante las últimas décadas.  El Estado socialista del Caribe, entre otros apoyos, protegió y educó a los niños sur-sudaneses durante los años de guerra, un hecho que ha garantizado la reconstrucción del nuevo estado africano y que evitó que los niños se vieran involucrados en el conflicto armado.

No es casualidad, pues, que la bandera de la nueva república haya imitado la bandera cubana, al igual que los catalanes tomamos la estelada como símbolo independentista siguiendo este modelo. El sábado 9 de julio Sudán del Sur se convirtió oficialmente un Estado independiente, el 54 de África y el 193 del mundo, después de que en enero más de 99% de sus ciudadanos apostaran en un referéndum por la independencia nacional.

El presidente de Sudán, Omar al-Bashir, y el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, fueron los dignatarios internacionales que asistieron a las celebraciones y reconocieron de facto la nueva república africana.  El acto de proclamación oficial de la independencia reunió a más de 3.000 invitados. 

La guerra de más de tres décadas acumuló cifras de unos dos millones de personas y obligó a que cuatro millones de personas más tuvieran que huir.  Un hecho que también desestabilizó la región, que incluye algunas de las economías más prometedoras del este de África como Kenia, Uganda y Etiopía.  El conflicto se terminó en 2005 pero aún se mantenían conflictos fronterizos con el norte, especialmente por los recursos petroleros que se disputaban. 

Los sur-sudaneses criados en Cuba también celebraron la independencia en Julbo y se mostraron agradecidos al estado socialista por su apoyo humanitario y educativo.  Williams, uno de los profesionales de prestigio con que cuenta el nuevo país africano declaraba "Yo no quiero que se parezca a Cuba",-refiriéndose a la República del Sudán del sur-"me gusta el sistema que vas a la escuela y no pagas, vas al hospital y no pagas ... " 

En este sentido, Salva Kiir Mayardit, investido como Presidente del nuevo estado africano de Sudán del Sur, recibió al vicepresidente cubano Esteban Lazo Hernández , y a la delegación que lo acompaña.  El dirigente cubano transmitió a su anfitrión un saludo del jefe del Estado cubano, Raúl Castro Ruz, y expresó las felicitaciones del pueblo de la isla antillana por el nacimiento de la nueva nación. 

El dirigente africano agradeció la histórica ayuda prestada por Cuba en la formación profesional de cientos de jóvenes de esta zona de Sudán, muchos de los cuales hoy ocupan importantes responsabilidades políticas y sociales.  Además, ratificó la solidaridad de su pueblo con la Revolución cubana y su justa lucha, y se interesó por la salud del líder de la Revolución, Fidel Castro.